María ha estado durante 6 meses en los campamentos de refugiados saharauis y nos gustaría conocer más sobre esta experiencia a nivel profesional y personal.
No es la primera vez que formas parte de una comisión en el terreno, desde cuándo colaboras con la Fundación? ¿Cómo empezó tu colaboración?
Comencé a colaborar como voluntaria en proyectos de cooperación internacional en oftalmología en el año 2010 en Guinea-Bissau con diversas entidades. Y con la Fundación inicié mi colaboración en los campamentos en el año 2015.
¿Por qué decidiste viajar a los campamentos de refugiados y refugiadas saharauis?
Conocía el conflicto desde hace años y estaba en contacto con la Asociación de Apoyo al Pueblo Saharaui de Zamora, la cual me animó en mi primera estancia en los CRS.
¿Cuál ha sido tu labor principal en los campamentos? ¿Qué otras labores has tenido que hacer una vez allí que no habías previsto?
La implementación del proyecto ha permitido la capacitación del personal sanitario en oftalmología. Concretamente, la transferencia de conocimientos, la mejora en el manejo del aparataje de consulta y la toma de decisiones. Se ha contribuido asimismo con un refuerzo institucional del Departamento de Oftalmología.
Al ejercer como médico en un área con carencia, mis labores no son solamente las de oftalmóloga, sino que colaboras en la asistencia sanitaria de todo el que lo necesita.
¿Qué problemática principal has encontrado para desarrollar las labores de formación y de asistencia? ¿Se han conseguido los objetivos previstos?
En general el equipo de trabajo y la población han colaborado de un modo satisfactorio para el buen desarrollo del proyecto y quizá el principal inconveniente ha sido el idioma. En los campamentos se habla un dialecto del árabe y esto supone, en ocasiones, dificultades para el entendimiento y transmisión de información a la población.
Sin embargo, los objetivos se han alcanzado de un modo satisfactorio, ya que no sólo se ha dado asistencia a un volumen de población mayor al previsto inicialmente, sino que se ha mejorado de un modo muy notable la capacitación en oftalmología de los recursos humanos locales, de modo que éstos puedan trabajar de un modo más autónomo de ahora en adelante.
Una vez cumplida vuestra misión, ¿los y las profesionales formados serán capaces de asistir a los pacientes de los campamentos de manera autónoma? ¿Con qué dificultades pueden encontrarse?
Las principal dificultad a las que tendrán que seguir enfrentándose es la compleja patología ocular que acontece en los campamentos junto con la escasez de medios para su abordaje.
¿Cómo definirías la realidad de esta zona en cuanto a salud ocular?
El desierto del Sáhara es probablemente uno de los lugares del mundo con mayor incidencia y prevalencia de patología ocular, debido a varios factores que coexisten. Entre ellos, la situación geográfica por la elevada incidencia de luz solar en uno de los mayores desiertos del planeta; la inexistencia de asistencia permanente en oftalmología, a pesar de las comisiones periódicas que se desplazan sobre terreno; la carencia de educación sanitaria; la falta de desarrollo del sistema sanitario; y por último el advenimiento de nuevas enfermedades como la diabetes.
Es una novedad para el programa de Ojos del Sáhara que una oftalmóloga esté tantos meses en terreno. ¿Crees que 6 meses son suficientes para llevar a cabo la labor?
Desde mi punto de vista sería preciso implementar el proyecto con un tiempo superior, ya que la formación del personal sanitario requiere un periodo de al menos varios años.
¿Cómo valoras esta experiencia a nivel personal? ¿Volverías a repetirla?
Ha sido uno de los mejores proyectos en los que he tenido la ocasión de colaborar, ya que me ha permitido el abordaje de líneas de trabajo con mayor dedicación, como es la formación del personal sanitario, la patología crónica y el refuerzo institucional. Al mismo tiempo me ha permitido formar parte de la sociedad local y conocer y comprender la cultura y el área en mejor medida. Sigo interesada en poder continuar con este proyecto en los próximos años, ya que las estancias prolongadas son las que permiten la mejora en salud visual a largo plazo.
¿Podrías definir con 3 palabras lo que representa para ti la labor de la Fundación?
Salud / visual / global
De esta experiencia ¿hay algo que te haya marcado especialmente?
La gran confianza depositada en el proyecto por parte de la población, de modo que nos han considerado un referente en salud visual en el área.