Niños jugando en los campamentos saharauis

Ojos del mundo ha recibido con preocupación el giro en la política exterior del Gobierno español en relación con el Sáhara Occidental y la incidencia que esta nueva postura pueda tener en la salud de la población saharaui refugiada en los campamentos de Tindouf (Argelia), donde la Fundación tiene en marcha un proyecto de cooperación oftalmológica.

El compromiso de Ojos del mundo con las personas saharauis con deficiencias visuales se remonta al 2001, año en el que se iniciaron las actividades de atención continuada a la salud ocular de la población de los campamentos. Desde entonces hasta ahora, más de 3.300 personas han sido operadas, principalmente de cataratas, en el marco de un proyecto que también incluye, entre otras, iniciativas de: formación de los y las profesionales locales (principalmente ópticos/as, enfermeros/as y maestros/as) a quienes se han proporcionado conocimientos en prevención, revisión ocular y corrección óptica; sensibilización de la población sobre hábitos básicos de salud ocular y detección precoz de defectos refractivos entre los niños y niñas de las escuelas.

La Fundación teme que el nuevo escenario incierto impacte negativamente en la salud de la población ya castigada los últimos años por las consecuencias derivadas, por un lado, de las restricciones de movilidad causadas por la situación de inseguridad en la zona y, por otro, de la crisis sanitaria de la COVID-19. Y se adhiere al comunicado de la Coordinadora de Organizaciones para el Desarrollo (https://coordinadoraongd.org/2022/03/la-decision-del-gobierno-sobre-el-sahara-es-contraria-al-derecho-internacional/), al que también se ha sumado LaFede, que advierte que esta decisión del Gobierno es contraria al derecho internacional.