Todos los proyectos de la Fundación de 2020 tuvieron que irse adaptando a las circunstancias y a los cambios continuos a los que obligaba la propagación del coronavirus. En el último trimestre del año, con la situación algo más controlada en Mozambique, se pudieron realizar tres campañas de cirugías de cataratas en la provincia de Inhambane.
En octubre tuvo lugar la campaña en el Hospital de Quissico, en el distrito de Zavala. Tras una semana intensa de quirófano, se intervino a 86 personas (47 mujeres y 39 hombres). También se operó de cataratas congénitas a dos niños de 8 y 9 años. La Diputación de Barcelona financió la donación de los medicamentos necesarios para esta campaña, junto con la dotación de materiales de prevención de la COVID-19 para la atención ocular de los pacientes, así como la reparación del biómetro óptico fijo del Hospital Provincial de Inhambane y la adquisición de un nuevo biómetro portátil para los desplazamientos de los equipos sanitarios a los hospitales rurales.
En noviembre se llevó a cabo una campaña en el Hospital de Massinga, en la que se operó de cataratas a 87 personas (46 mujeres y 41 hombres). La aportación del Ayuntamiento de Zarautz permitió pagar los costes de desplazamiento de los profesionales sanitarios.
Y ya en diciembre se realizó la última campaña de cirugías del año en el Hospital Rural de Vilankulo. Se practicaron 92 intervenciones, a 50 hombres y 42 mujeres, pacientes que habían sido previamente evaluados por el técnico en oftalmología del distrito. Una campaña de cirugías de cataratas que se desarrolló sin complicaciones y que tuvo lugar gracias al apoyo, una vez más, de la ESCRS (European Society of Cataract and Refractive Surgeons).