Ojos del mundo lleva tiempo trabajando en Mali para eliminar el tracoma, una enfermedad ocular que se transmite por el contacto directo con personas infectadas, sobre todo en entornos familiares, y por moscas que se ponen sobre los ojos. Cuando una persona es infectada por la bacteria, en su párpado se forma un pliegue hacia adentro que provoca que las pestañas rasquen con el globo ocular, alteración que se llama triquiasis.
En esta ocasión, se ha querido dar prioridad a la atención de la triquiasis en el distrito de Koro, ya que, según los datos estadísticos del programa nacional de salud ocular, es un distrito prioritario en el contexto de la eliminación de esta enfermedad.
La clave de su prevención es un buen saneamiento básico y la educación sobre la correcta higiene personal. Es por ello por lo que la campaña ha ido enfocada a la rehabilitación de diferentes pozos de agua defectuosos para darles un uso correcto y útil para la población, incrementar su acceso a agua limpia y así poder mejorar su higiene.
Se llevaron a cabo varias misiones de identificación en ocho lugares de perforación, incluidos los de Guingal, Tonon, Sinda y Péné, con la participación del jefe del servicio hidráulico local, los agentes del departamento de oftalmología del Centro de Salud de Referencia , los diferentes ayuntamientos locales y el consejo del círculo de Koro.
Aparte de la puesta a punto de los distintos pozos de agua, en el pueblo de Péné, se llevó a cabo la transformación de la bomba de accionamiento humano en una bomba que funciona con energía solar.
Por otra parte, también se organizó una comisión de revisión y cirugía de triquiasis con un equipo formado por diez oftalmólogos. La campaña se extendió a diez áreas distintas de Mali incluyendo Koro, Guingal, Tonon, Sinda y Péné. En total se examinaron 12.408 personas de las que 37 fueron operadas.