“En todo el mundo estamos viendo los efectos devastadores del cambio climático en nuestro entorno y nuestra salud. La salud ocular se está viendo afectada por el aumento de las infecciones por tracoma, las deficiencias de vitamina A, las cataratas, la degeneración macular asociada a la edad, el glaucoma, las enfermedades alérgicas y la sequedad ocular.” Peter Holland, CEO IAPB
La degradación del medio ambiente, la contaminación atmosférica y el cambio climático están teniendo efectos devastadores en todas las partes del mundo, con mayor incidencia en las comunidades vulnerables y de bajos ingresos. El cambio climático está exacerbando la pobreza y la desigualdad sanitaria y frenando los esfuerzos de la comunidad sanitaria mundial para hacer realidad la cobertura sanitaria universal.
La salud ocular se está viendo afectada. Los primeros estudios han demostrado que las altas temperaturas y las escasas precipitaciones -ambas afectadas negativamente por el cambio climático- están asociadas a un aumento de la infección por tracoma. Se prevé que la deficiencia de vitamina A aumente por un probable incremento de la inseguridad alimentaria debido al cambio en los patrones de lluvia predecibles que causan tanto inundaciones como sequías y que afectan a las cosechas. El calentamiento global puede contribuir a la aparición temprana y a la aceleración de las cataratas debido a la pérdida de la capa de ozono y al aumento de los rayos UV que afectan al ojo. Además, existe una asociación entre la contaminación atmosférica relacionada con el tráfico y las enfermedades oculares alérgicas graves, el glaucoma y la degeneración macular relacionada con la edad. Los fenómenos meteorológicos extremos provocarán un aumento de las lesiones físicas, incluidas las oculares, y la experiencia demuestra que las personas con discapacidades y problemas visuales se ven afectadas en mayor proporción.
El cambio climático alterará la prestación de servicios de salud ocular. Los huracanes y ciclones que se han producido en todo el mundo han provocado el cierre temporal o la destrucción de instalaciones médicas y de las cadenas de suministro de material médico esencial, como medicamentos, material quirúrgico, gafas y dispositivos de ayuda. Se prevé que el cambio climático empuje a poblaciones ya vulnerables hacia la pobreza extrema, impidiendo aún más su acceso a los servicios sanitarios.
Por otro lado, la sanidad es un gran consumidor de recursos y un importante emisor de gases de efecto invernadero. En todo el mundo, la sanidad es responsable de 2.000 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (CO2e) y el 4,4% de todas las emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) mundiales.
La integración de las estrategias climáticas y medioambientales tiene importantes beneficios para el sector sanitario y su población beneficiaria, ya que mejora la salud gracias a un mayor nivel de actividad sanitaria, reduce la contaminación ambiental y disminuye los efectos adversos del cambio climático, lo que conlleva un aumento de la productividad, una mejora de la calidad de los servicios y una reducción de los costes.
Ojos del mundo se suma a la propuesta de la IAPB para integrar la sostenibilidad medioambiental en las estrategias, proyectos y operaciones:
LIDERAZGO. Reconocer la emergencia climática y desarrollar actividades vinculadas con la sostenibilidad medioambiental, con el objetivo de ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y apoyar los objetivos de desarrollo sostenible (ODS).
Por ejemplo: difundiendo mensajes y estrategias de promoción y formando al personal y a los equipos de salud ocular en el conocimiento y la difusión de mensajes de acción climática. Y también tratando de crear servicios de salud ocular limpios, ecológicos y acogedores en beneficio de profesionales y pacientes.
COMPRAS SOSTENIBLES. Aplicar una política o procedimiento de compras sostenible, seleccionando productos que tengan un menor impacto en el medio ambiente, que consuman menos energía y agua en su producción y uso, que utilicen menos sustancias químicas nocivas y que integren los principios de la economía circular (lo que ocurre al final de su vida útil) en su proceso de adquisición.
REDUCIR EL USO DE COMBUSTIBLES FÓSILES. Maximizar el uso de energías renovables en las oficinas e instalaciones sanitarias y mejorar la eficiencia energética de edificios y equipos, incluyendo la iluminación, el aire acondicionado y los equipos médicos y de oficina.
AGUA. Tener en cuenta la tecnología de ahorro de agua, como el reciclaje de aguas usadas, y los equipos de uso eficiente del agua, asegurando de que el sistema de agua se controla para detectar y reparar cualquier fuga.
REDUCIR Y ELIMINAR DE MANERA SEGURA LOS RESIDUOS. Tener en cuenta la jerarquía de residuos «reducir, reutilizar, reparar y reciclar». En el caso de los residuos médicos peligrosos, elegir una opción de eliminación segura que sea la más adecuada y en uso en cada territorio.
REDUCIR Y VERDEAR LOS VIAJES. Reducir la cantidad de vuelos cuando sea posible, considerando alternativas como las videoconferencias; reducir la cantidad de viajes de los/as pacientes mediante modelos alternativos de atención, como la telemedicina, y mediante el fortalecimiento del sistema de salud ocular de proximidad, y promover los desplazamientos activos y el transporte público para el personal y los/as pacientes, siempre que sea posible.
SEGUIR LOS CUATRO PRINCIPIOS DE LA PRÁCTICA CLÍNICA SOSTENIBLE. Son la prevención, el empoderamiento del paciente, la prestación de servicios de salud ocular de bajo costo y el uso de procedimientos médicos y tecnologías que tengan un menor impacto ambiental. Se pretende reducir la demanda de servicios de salud ocular, el coste de la prestación y su impacto medioambiental.
IMPLEMENTAR LA SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL EN LA EDUCACIÓN. Por ejemplo, integrando la sostenibilidad ambiental en los programas de educación en salud ocular en las escuelas y ofreciendo recursos sobre salud ocular ambientalmente sostenible en el sitio web.
FOCALIZAR LA INVESTIGACIÓN. Apoyar investigaciones sobre servicios de salud ocular sostenibles para generar pruebas para la promoción y la práctica de un cambio sostenible.